Género y conflicto

Cuando hablamos de género hablamos del conjunto de características adoptadas, social y culturalmente, como expresión y manifestación de la identidad sexual de las personas. Y podemos entender como conflicto a una situación donde una o más personas no están de acuerdo con el modo de actuar de un individuo o grupo. Es por ello por lo que podemos hablar de transexualidad, transgénero o transformismo como conflicto social y actual.

Trans (persona): Toda aquella cuya identidad sexual no coincide con la asignada al nacer. Sin prejuzgar otras acepciones sociales, el término trans* ampara múltiples formas de expresión de la identidad de género o categorías como personas transexuales, transgénero, travestis, variantes de género, queer o personas de género diferenciado, así como a quienes definen su género como «otro» o describen su identidad en sus propias palabras.

Las dudas que se plantean en torno a la transexualidad o las identidades trans* tienen su origen en la construcción social del binarismo de género, es decir, que sólo existe dos géneros, masculino y femenino. Nos han transmitido como única posibilidad la división de las personas en dos categorías, hombre o mujer, relacionando directamente estas categorías con una autonomía, mujer: vulva, vagina y hombre: pene, testículos. Cuando una persona se encuentra fuera de este marco es cuestionada y muchas veces rechazada, interpretada como una amenaza al orden establecido.

Lo cierto es que la diferencia entre hombre y mujer es una cuestión que va más allá de un determinado rasgo biológico, es un sentimiento individual, íntimo y subjetivo de pertenencia a una de esas categorías, en ocasiones a las dos o a ninguna, pudiendo incluso fluir entre una y otra.

Hay infinitas formas de vivir la identidad y el género, todas ellas válidas y respetables. A veces hablamos de conductas o relatos comunes, pero no significa que sean excluyentes, sólo son una recopilación de experiencias frecuentes.

Las necesidades de información muchas veces empiezan por una revisión personal sobre nuestras creencias, hacer un proceso de auto cuestionamiento para poder iniciar el aprendizaje libre de prejuicios. Aun y así no es necesario entender la gran diversidad del ser humano para respetarla.

Las personas trans* son una realidad aún poco visible. Es por ello por lo que creo que es importante y necesario crear redes de apoyo tanto familiar como de amigos y amigas como sujeción y refuerzo motivacional en la vida de una persona trans. La identidad sexual de cualquier persona se hace más fuerte en la adolescencia y es el momento crucial donde se deben reforzar los lazos familiares, puesto que si no se tienen y se carecen de ellos estos pueden encadenar y verse afectados los estados psicológicos y anímicos. Otro aspecto importante es la información, puesto que para ayudar a una persona trans hay que tener el conocimiento adecuado sobre el tema para evitar acciones discriminatorias, confusas e incómodas. El apoyo familiar y la información juegan un papel importante ya que el hecho de que se conozca la verdadera realidad de las personas trans* en los diversos ámbitos de la vida es beneficioso para ellas o ellos.

Unido a ello, están las asociaciones, así como la educación y los medios de comunicación, que son un pilar importante en el desarrollo y en el trabajo con la persona trans*, como también es enseñar valores, respeto y tolerancia al resto de la sociedad con respecto a ellos o ellas. No obstante, nuestra sociedad aún impone la interiorización de la heterosexual, es por ello por lo que, cualquier forma de identidad diferente supone la marginación, la eliminación y el rechazo, que en ocasiones puede ser verbal y en otras llegar a la violencia física. Es de vital importancia la toma de conciencia en el ámbito educativo, creando guías de educación donde se amplíen conocimientos para las distintas etapas educativas, así como incidir en enseñar una variedad amplia de conceptos, no solo la transexualidad sino la diversidad humana en su plenitud así, se haría más consciencia y se evitaría el rechazo debido al desconocimiento.

También, otro aspecto a destacar es el proceso que pasa una persona trans, la lucha consigo mismo o misma, con la sociedad, con las leyes, con el entorno, es por ello por lo que sin información la sociedad no estará preparada para aceptar esos cambios, cambios que consideran estar fuera del orden social porque olvidan lo esencial, todos y todas son personas. Todo esto, está unido a una sociedad racista, sexista, patriarcal que hace que se vean afectadas y afectados las personas trans no siendo aceptadas ni aceptados las cuales deberían y deben de ser recibidas con naturalidad, así como estar integradas e integrados como cualquier otra persona.

Es cierto que, gracias a la labor de las asociaciones tanto aquellas personas trans* como familiares obtienen respuestas a esa realidad, obteniendo herramientas, protocolos de acompañamiento y actuación, estableciendo alianzas entre profesionales de todos los ámbitos y con otros colectivos o movimientos sociales, visibilizándolos. Aunque también es cierto que, sigue la lucha de padres y madres de hijos e hijas menores de edad que reivindican el poder modificar legalmente el nombre de sus hijos e hijas sin tener que esperar 6 meses de hormonación, haberse realizado la cirugía de reasignación de sexo o haber cumplido la mayoría de edad. Existe también la necesidad de ofrecer mucha más información que conlleve reconocimiento y derecho para las personas trans*.

Concluyo diciendo que, se puede prevenir situaciones de discriminación y marginación que lleven a situación de riesgo o exclusión social mediante el apoyo educacional e institucional, así como los familiares. Creo que no solo es importante que las personas trans* tengan apoyos familiares y de amigos, sino que además la sociedad tenga conocimientos sobre todo lo que conlleva el proceso de cambio de dichas personas y la vital importancia de ser tratados y tratadas con afectividad y con la misma naturalidad que se trata a cualquier otra persona que no está en esa situación.

Glosario:
Expresión de género:
Rol social que adoptamos como manifestación o expresión correspondiente a nuestra identidad sexual. Expresión de la propia definición de la personalidad que cada persona siente en cuanto al sexo propio con independencia de si se corresponde o no con lo socialmente aceptado para su sexo registral (Estereotipos de género).

Transfobia: Discriminación, conductas y actitudes negativas hacia las personas trans.
Transformismo: Expresión artística en la que una persona se expresa, comporta y transforma su aspecto. El transformismo usualmente es una práctica teatral o lúdica que no implica una orientación sexual concreta ni identificación con el género que usa para su expresión.

Transgénero (persona): De un tiempo a esta parte se ha extendido el uso de esta palabra que en muchas ocasiones aparece empleada como sinónimo de “persona transexual”. Pero, si entendemos por sexo ser mujer u hombre (o las dos cosas o ninguna), y por género aquello que se considera socialmente masculino o femenino, la palabra idónea en castellano para definir a aquella persona que no se identifica con el sexo asignado al nacer sería “transexual”.

En otras ocasiones “transgénero” se utiliza de forma inadecuada, pretendiendo hacer una distinción entre personas trans que habrían decidido realizarse una cirugía genital (utilizando en este caso el término transexual), y personas que no se habrían realizado dicha cirugía (utilizando en este caso el término transgénero), pero tener realizada una cirugía genital no marca ninguna diferencia en la identidad, favoreciendo la categorización de las personas entre más o menos trans, más o menos auténticas, con más o menos derechos, todo ello basado en un sistema binario dicotómico cisexista y exponiendo la intimidad de las personas, derecho fundamental que no se debería violar.

Transexualidad: Diferencia entre el sexo asignado a la persona por otras al nacer, en atención a la combinación estadísticamente más frecuente entre identidad y anatomía genital, y la identidad sexual y/o de género que la persona siente y manifiesta. No conlleva asociado ningún itinerario preestablecido (ni médico ni social).

Orientación Sexual: Preferencia afectiva y/o sexual de la persona por personas de esta o diferente identidad sexual. Da lugar a la clasificación entre personas heterosexuales (preferencia por personas con identidad sexual diferente a la propia), homosexuales (preferencia por las personas con la misma identidad sexual: gays o lesbianas), bisexuales (preferencia por personas de ambas identidades sexuales), asexuales, pansexuales… La orientación sexual se describe como tendencia ya que, por ejemplo, el hecho de mantener relaciones con personas de la misma identidad sexual no siempre implica una orientación homosexual, bisexual, pansexual…

Vanesa R. Aparicio
Alumna en prácticas del CFGS en Integración Social

Junio de 2021

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