¿Te has preguntado alguna vez si la emoción tiene duración? ¿Si ese momento en el que nos ruborizamos, se nos acelera el corazón, ponemos “pies en polvorosa” o, incluso nos quedamos bloqueados en el lugar donde nos encontramos sin saber qué decir o hacia dónde mirar, tiene un tiempo estimado? ¿Somos conscientes de que las emociones tienen una razón para nuestra existencia?
El Taller de Emociones en Familia, que ha tenido lugar gracias a la colaboración del ayuntamiento de la Villa de Arafo, del ayuntamiento de la Villa de Arico y del ayuntamiento de Güímar, a través del proyecto Incluyendo +, ha podido disipar éstas y otras cuestiones que han ido surgiendo en el transcurso del mismo.
Hemos aprendido lo importante que es saber identificar lo que está sucediendo en nuestro interior para poder gestionarlo y actuar de manera consciente, con toda la tranquilidad y confianza posible que nos permita seguir cumpliendo sueños, ideas, metas. También tuvimos la oportunidad de escuchar llantos, risas, palabras pidiendo un abrazo sin que hiciera falta la señal precisa, ya que su expresión corporal lo reclamaba.
¡Qué importante es esto último! ¿Verdad? Pedir un abrazo sin pedirlo… El taller nos ayudó a reflexionar, entender, animarnos a poner en práctica las capacidades que poseemos para poder autocontrolar nuestros impulsos y que “nuestro semáforo interior no alcance el color rojo”. Nos enseñó, a su vez, que las emociones forman parte de nuestro lenguaje universal, el cual nos envía señales para atender y comprender lo que ocurre en nuestro maravilloso mundo interior, con el objeto de autoconocernos, autorregularnos y automotivarnos a buscar el origen de lo que nos ha provocado “ese nudo en el estómago”.
El Enfado, la Alegría, el Asco, la Sorpresa, la Tristeza, el Miedo, forman parte de nuestras emociones primarias, unas nos gustan más que otras y quizás nos gustaría dejar a algunas de lado, pero todas ellas forman un equipo importantísimo con el que jugamos en esta gran aventura que llamamos vida. Todas ellas nos cuentan algo, quizás a veces, en susurros y otras con tal fuerza que haría temblar el suelo que pisamos, pero cabe destacar, como aprendimos en “El Desarrollo de las Emociones en Familia”, que todas y cada una de ellas tienen una función y que nuestro reto es averiguar cuál. Y cómo, nos pasa a todos y a todas, en muchas circunstancias, lo difícil es dar el primer paso en la puesta en práctica, pero cuando lo damos, a veces incluso nos quedamos rumiando… “¡¿por qué no lo habré hecho antes!?”. Pues porque no lo sabíamos o porque no podíamos, quizás lo importante es tenerlo en cuenta a partir de ahora y desde este punto seguir sorprendiéndonos… ¿quién sabe?
Para ir concluyendo con las experiencias adquiridas con la ejecución del taller educativo que ha tenido lugar en los tres municipios que colaboran con la puesta en marcha del proyecto Incluyendo +, sería interesante hacerlo con cuestiones que surgieron al inicio del mismo: “¿Las emociones son innatas o aprendidas? ¿Somos honestas/os con lo que pensamos, decimos y sentimos? ¿Decimos que nos encontramos bien cuando sabemos que en nuestro interior impera otro sentimiento? ¿Nuestra expresión verbal es un fiel reflejo de nuestra comunicación no verbal?
Gracias a las personas que han hecho posible este gran aprendizaje, “para así seguir emocionándonos.”
El proyecto “INCLUYENDO +: Programa de Actividades de Inserción para Unidades de Convivencia perceptoras de PCI, Renta Ciudadana y/o IMV” está en marcha a través de la subvención de la Consejería de Derechos Sociales, Igualdad, Diversidad y Juventud del Gobierno de Canarias en la convocatoria de subvenciones para 2022 destinadas a la ejecución de proyectos en las áreas de personas mayores, inmigración, voluntariado e inclusión social. Nuevamente, contaremos con la colaboración del Ayuntamiento de la villa de Arafo, del Ayuntamiento de la Villa de Arico y del Ayuntamiento de Güímar.